Conectando con... María Filomena

ESPECIAL PARA MASCOTAS

Nuestra estimada amiga María nos cuenta acerca de cómo y por qué comen verduras y frutas los humanos. Un tema del que seguro que nos hemos preguntado todos alguna vez.

Lily: Hola María. Cuéntanos... ¿para qué son útiles las frutas y verduras en los humanos?

María: Pues verás Lily, esto es muy sencillo. El consumo diario de frutas y verduras, en cantidades suficientes, ayuda a evitar enfermedades graves, así como la diabetes y el cáncer, así como deficiencias de vitaminas y minerales vitales. En resumen: Es sano.

Lily: Aaaaah... bueno, pues gracias. ¿Pero cómo podéis soportar ese horrible sabor?

María: No saben tan mal, ¿sabes? En realidad, hay gente a la que incluso le gusta.

Lily: ¡¡¡AGGG!!! ¡Que asco! ¿Por qué los gatos y los perros no las comen si son tan sanas?

María: Antes, los gatos y los perros si que las comían, porque eran animales salvajes, y al cazar, comían la fruta y la verdura que habían comido sus presas hervíboras, y con ese poquito les bastaba. Pero ahora ya no cazan, así que ya no las comen. Y como los gatos y los perros son carnívoros desde siempre, no les gusta el sabor de la fruta y la verdura, y no la comen.

Lily: ¡Muchas gracias María! Tu conocimiento nos ha sido muy útil, aunque ya sabes que no te vamos a hacer ni caso, así que no esperes ver un repentino amor por la fruta y la verdura en tus mascotas.

María: (risas) ¡Claro Lily! Ya he aprendido la lección. Tengo 3 gatos, ¿sabes? Y como mi misión aquí ha terminado, me veo en la obligación de despedirme.

Lily: Adiós María. ¡Hasta la próxima amigatos!

NUEVA "SECCIÓN": CONECTANDO CON...

Hola!!!

Hoy hemos decidido añadir una nueva "sección". Se llamará Conectando con... y lo utilizaré para publicar entrevistas.

Serán entrevistas hechas a humanos, gatos y quizás a otros animales, y en ellas podremos aprender muchas cosas relacionadas con los animales y sus comodidades. Y a veces, en los ESPECIALES PARA MASCOTAS, serán humanos entrevistados por el interés de los animales.

Esperamos que lo disfrutéis.

Juguete nuevo

¡Hoy volvió mami!
Nos dijo que había tardado tanto porque habían tenido que parar a comer (¡humanos!) y además habían hecho otra parada en casa de la abuela de mi ama.

Le pregunte por que, porque ella, desde siempre, me había dicho que no le gustaba nada su abuela. Me respondió que a ella no le habían dicho nada, solo habían parado y punto. Y ya que estaban, dado que mi ama no iba a pasar nunca mas una noche en casa de su abuela, trajeron los juguetes y cosas suyas que tenia en la casa.

Entre esas cosas (figuritas, muñequitos, libros...) encontré yo, rebuscando rebuscando junto con Lily en la inspección general que siempre hacemos cuando mi ama pasa una noche fuera de casa, una pelotita de lana, muy vieja, de la que me enamore inmediatamente.

Le pregunte a mi ama si podía quedarmela, y en cuanto me vio, la cogió, sonrió y me dijo:
-¡Ah, si! La traía para vosotros. Es muy viejita, y me trae recuerdos; no buenos pero me los trae. Tratadla bien. Y cuida de que Lily no la rompa, ¿eh?

Después de eso me enfade con ella. Yo pensaba que la pelotita era para mi, y resulta que también era para Lily. Pero en fin, al menos tenemos juguete nuevo. Aunque sea compartido.
Si al final me va a caer bien la abuela de mi ama, que resulta que hizo la pelotita de marras...

Desmintiendo algunas mentiras sobre los gatos

Después de mis años de experiencia con los gatos (prácticamente desde los dos años), he podido constatar que son animales muy inteligentes, y muy sensibles.
Pongamos como ejemplo a mi gato Zar esta vez:

Él es un gato persa de casi tres años de edad. Se dice por ahí que los gatos persas son una raza extremadamente tonta. Antes, basándome en lo que había visto en los dos gatos persas de mi hermana, pensaba que era cierto.
Pero desde que tengo a Zar, me he dado cuenta de que todo son patrañas.
Cuando llega la hora de la comida, él se sienta frente a nosotros mirándonos con ojillos tiernos. A veces nos dá con la pata suavemente, y maulla bajito. Es muy paciente, y puede esperar horas. Al final, nos rendimos, y le damos algo de nuestra comida. Está claro que los persas no son tan tontos como parecen. Sólo dejan que pensemos eso porque les viene bien. Sin más.

Además, gracias a Lily, mi gatita siames de dos años de edad, estoy segura de que hay muchas otras mentiras que pesan sobre los gatos.
Se supone que los siameses son muy ariscos, pero mi gata Lily es un amor. De madrugada se tumba junto a nosotros silenciosamente, respetando nuestro sueño. Pero si ve que abrimos los ojos, salta sobre nosotros y empieza a lamernos y a jugar con nuestras manos por debajo de las sábanas.

Y antes de terminar este artículo, en el que espero que los lectores se hayan dado cuenta de que no tienen que creerse todo lo que les cuentan sobre los maravillosos animales que son los gatos,me gustaría desmentir otra cosa:
Los gatos sí son leales.

La gente dice que los perros son los mejores amigos del hombre. Y no lo niego, pero tampoco lo afirmo. Un día le pregunté a un amigo que decía que le encantaban los animales por qué no tenía gatos, y me respondió:
-Escucha, los perros son realmente muy leales. Son lo más de lo más. Los pájaros, los roedores y demás te agradecen lo que haces por ellos, y aunque no son tan leales como los perros, no te traicionarán. Los gatos, sin embargo, son de lo peor. Un gato jamás te agradecerá lo que haces por él. Siempre se irá con el que más le dé, y jamás dejará de pedir. Los gatos venderían a su propia madre si hiciese falta.

Esas fueron exactas sus palabras, y francamente me indignó que alguien tan inteligente y tan abierto manteniese esas ideas tan antiguas.
Repito, para que todos se enteren: LOS GATOS SÍ SON LEALES.

Ya trataremos en otro artículo el por qué, y os daré algunos ejemplos. Porque además de leales, los gatos son valientes. Recuerdo una encuesta popular que ví hace unos meses, que decía que sólo el 40% de los perros esperarían a su dueño ante una casa en llamas, y el 60% restante saldría corriendo de allí. Sin embargo, el 74% de los gatos sí lo harían, dejando un porcentaje de 26% de gatos que se marcharían, y volverían más tarde.

Me han invadido el blog!

Bueno, pues resulta que ahora, además de compartir blog con Lily, tengo que compartirlo con mi ama, porque quiere publicar no se qué artículos sobre animales y no sabe donde.
Esta es el e-mail que nos acaba de mandar:

"A mis queridos mininos:
He tardado dos horas y media en llegar, pero ya estoy en Ciudad Real. Por cierto, me acabo de enterar de que no nos vamos a quedar a comer sólo, sino que nos quedaremos durante dos días.
Lo siento.

En fin, que os iba a decir que estoy escribiendo unos artículos acerca de animales y su comportamiento (poniéndoos como ejemplo, claro) y que como no me voy a crear otro blog, los voy a publicar en el de Zar. Lo sientooo.

Hasta más tarde."

Así que ya sabéis amigatos. Las entradas que veáis en negrita son de mi ama. Si no estáis seguros de de quién es una entrada, podéis preguntarlo en los comentarios o mandarnos un e-mail, o revisar las últimas entradas, o incluso mirar las etiquetas. Si la entrada es de Lily, pondrá "Lily", si es de mi ama pondrá su nombre, y si es mía pondrá "personal" o cualquier otra cosa.

Y perdón por complicároslo todo así, ¿eh?

Aburrimiento absoluto

Nunca pensé que pudiera decir esto, pero estoy harto de dormir.
El suceso más interesante desde que volvieron los abuelitos con mi ama fue que ayer se nos coló una mosca, pero duró poco, porque Lily en seguida se la cargó.

Espero que mi ama vuelva al cole pronto, porque siempre tenía historias interesantes que contar. Y ahora... en fin.
Por cierto, mi ama se va con los abuelitos a Castellón. Así al menos tendrá algo que contar...

Bueno amigatos, hasta la próxima noticia interesante.

Vuelven a casa

Hola amigatos.
Hoy mi ama vuelve a casita con los abuelitos.

Al parecer se van a quedar a comer, y luego van a venir inmediatamente a casa.
¡Y menos mal!

Esperemos que aparezca pronto, porque ya estoy harto de comer solo pienso, y echo de menos alguna que otra latita.
Y además, Lily se acaba de terminar el poco pienso que quedaba...

Nos vemos mañana, amigatos.

El que se fue a comer, perdió su silla

Hola!

Estoy aquí porque Zar iba a sentarse a escribiros a escondidas, pero "me temo" (es un decir) que le he quitado el sitio. Y es que el que se fue a comer perdió su silla tan bien como la perdió el que se fue a Sevilla. Ya se sabe que estos refranes tiene más vueltas de hoja...

La semana sigue sin muchos incidentes.

El abuelito a lo mejor se va con la abuelita y mi ama a la casa de la tía Lucía uno o dos días.

¡Lo que nos faltaba!

Bueno, yo os dejo, que estoy oliendo al abuelito por el ascensor, y no me gustaría que me pillase ahora, más que nada porque esta vez no podría decir "ha sido Zar".

"Chao" como dicen las famosas humanas (yo estoy muy informada)...

Hasta el domingo

La abuelita y mi ama se van de nuevo hasta el domingo.
¡Y que haremos nosotros en todo ese tiempo!

Y luego se van a Castellon durante una semana, y esta bien claro que tampoco nos van a llevar. Y luego se van a casa de los padres de la abuelita varios dias y ¿adivinais? Tampoco nos llevan.

Asi que durante este mes voy a poder escribir muy poco, porque mi ama no me deja tocar el ordenador si ella no esta para vigilarme.

Adios amigatos. Espero que nos veamos pronto de nuevo.