jueves, 7 de enero de 2010

Nieve!!!


Estaba yo tan tranquilo tumbado en el sofá durmiendo cuando vi a la abuelita abrir la puerta del pasillo.

Fui corriendo hacia allí. Lily ya había llegado.

Os preguntareis por que tanta agitación porque habrán una puerta...bueno, es que la puerta del pasillo da a la habitación de los abuelitos, la de mi ama y los dos baños de la casa, y no la suelen abrir. Ya sabéis que los gatos no soportamos las puertas cerradas.

Hemos entrado preguntándonos por que la abuelita habría abierto la puerta del pasillo. No la suele abrir hasta que mi ama se despierta(ultimamente a las 12 y media de la mañana).

He cruzado la puerta de la habitación de mi ama, pero he estado unos pocos segundos apenas, porque la abuelita me ha perseguido hasta que he salido(es que si mi ama se despierta por nuestra culpa se enfada mucho).

Sin embargo, no ha tenido ningún problema en abrir la puerta del abuelito y dejar entrar a Lily...

La abuelita ha despertado al abuelito gritando algo que no he entendido y el abuelito ha salido de la habitación.

Yo, aprovechando la agitacion general(aunque no sabia por que era)para colarme de nuevo en la habitación de mi ama, que, a pesar de que la abuelita había levantado la persiana, seguía durmiendo(yo también se hacerlo, que conste).

Según mi costumbre, me he subido al alféizar de dentro de la ventana(ya me entendéis)gracias al escritorio de mi ama.

Entonces ha sido cuando he visto esas cositas blancas, que parecían redondas(pero que me habían explicado que no lo eran)y que caían del cielo.

Al principio me he asustado mucho, pero he recordado que eran cuando he oído gritar a Lily:
-Los marcianos nos atacan!!! Vienen en unas navecitas pequeñas y blancas! Ayudaaaa!!!

-No son marcianos, Lily-le he explicado.-Es nieve.

-¿Que es eso?¿Y tu como lo sabes?-me pregunto ella sin creerselo.

-Pues es lo que ves. Solo es agua congelada por el frío. Y lo se porque soy mas mayor que tu y mas sabio, y tengo mas experiencia.

Ya no volvió a gritar como una loca, pero creo que no se lo creyó del todo.
De todas maneras, da igual.

Bueno, supongo que ya os he dicho que eran.
Nieve, por supuesto.

En Madrid no nieva mucho, ni siquiera por Navidad, pero yo sabia lo que era porque el año que vine a la casita de mi ama nevaba un poquito.

La nieve me encanta, tan blanca y bonita.
Me han dicho que si te fijas mucho puedes ver lo bonita que es realmente. porque no es redonda, ¡claro que no!

En la foto os muestro varios tipos de formas que un copo de nieve puede tener.

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